MUSA ARCANAM
«Musa, deidad que protege las ciencias y las artes liberales».
La vez que creé el seudónimo de Musa Arcanam, pensaba en lo que más me gusta: la música y la literatura. Todo lo que expresa, alivia y encanta. La forma en que une mundos sin tener que haber palabras habladas de por medio. Sólo fantasía, sueños y esperanzas. Un camino que ofrece un ápice de felicidad que no vemos en nuestro día a día.
Lo que las Musas Griegas aportan a la literatura y a las creencias es, con palabras cortas, un magnífico mundo mítico.
Lo místico, es en sí, lo arcano. Cada pensamiento escondido tras un velo de palabras o de simples frases que atesoran un mundo de cavilaciones y sueños. Lo que cada uno somos.
Sin embargo, yo no soy la Musa de nadie, ni la diosa de la inspiración. Tampoco señorita misterio. Pero cuando el tul de Musa Arcanam cubre mis sentidos, puedo decir que es ahí cuando entro en mi verdadero universo, y la inspiración guardada en mi corazón se abre paso mediante mis manos, mis oídos, mis ojos.
